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martes, 25 de mayo de 2010

SEXO Y PROSTITUCIÓN



Nuestra actitud frente al tema es relativa a la situación en que debemos afrontarlo, como todos los fenómenos sociales y humanos, este es observado desde diferentes ópticas dependiendo de si estamos involucrados de alguna manera o si solo somos observadores ajenos al problema.

Desde lo más lejano asumimos la actitud de jueces y críticos sin interesarnos por las causas y los factores que motivan y hacen acrecentar esta conducta que se convierte en una forma de vida.
Cuando estamos involucrados de alguna manera solo pensamos en salvar nuestra integridad moral justificando la participación directa o indirecta en el problema.
Y por supuesto quienes protagonizan y viven directamente todo lo que encierra este mundo deben defenderse y superar todos los obstáculos que la sociedad ”pura y santa” pero bien egoísta utiliza para protegerse.

Ante muchas otras conductas rechazadas social y legalmente, tal vez la que encarna mas desprecio y discriminación entre las personas es la prostitucion.
He escuchado que se le nombra como una de las profesiones u oficios más antiguos de la humanidad; básicamente consiste en vender el cuerpo para el disfrute sexual, satisfacer las necesidades y deseos sexuales de otras personas a cambio de una recompensa, que generalmente es económica.
Como humanos que somos y al igual que todos los organismos vivos tenemos la necesidad de reproducirnos, pero a diferencia de otros seres poseemos de manera privilegiada un sistema reproductivo que no solo sirve para ese fin, tenemos la capacidad de disfrutar de manera indescriptible de las relaciones que involucran este proceso, dándole un significado mas grande e importante que el de solo perpetuar nuestra especie.
El sexo, elemento esencial en la existencia humana, factor importante en el comportamiento y desarrollo de la humanidad, misterioso ingrediente de satisfacción física y psicológica que se constituye en una de las grandes debilidades influyentes en la vida de las personas.; es tal su efecto que puede afectar fuertemente el equilibrio, la conducta, la capacidad moral y espiritual de los seres humanos, por causa del deseo sexual una persona es capaz de degradarse física, psicológica y moralmente, es capaz de dañar su entorno y a quienes le rodean, es capaz de desviar el sentido de su existencia en la búsqueda de placer; como también através del sexo puede encontrar una motivación valida para lograr el equilibrio de vida.
Afortunadamente y como seres pensantes tenemos la capacidad de crear y de asumir conductas, comportamientos y formas de pensar en dirección al bienestar, a la tranquilidad y a la conservación de la armonía, porque de lo contrario las delicias del sexo nos conducirían a actuar como seres totalmente irracionales en la búsqueda únicamente de satisfacciones primarias.
Creo que este es un ingrediente primordial favorable al fenómeno de la prostitucion, el deseo sexual, el apetito sexual no satisfecho y el desequilibrio entre la vida material y espiritual, mantienen latente entra las personas la tentación de vivir experiencias que rompen con los roles sociales y morales predeterminados y establecidos, a esto podemos sumarle el constante mensaje que recibimos y que invita a disfrutar de una muy activa vida sexual, representado por tentadores símbolos y exquisitos manjares o para ese propósito.
Por otra parte, está el factor socio económico que se convierte en el principal detonante de conductas como la delincuencia, la drogadicción y la prostitucion.
Así pues la prostitucion, se convierte en un recurso “fácil” para sobrevivir cuando la necesidad económica esta presente, incluso así no reine la pobreza sigue siendo un camino aprovechable para lograr objetivos económicos y de mejoramiento económico personal.
Para prostituirse no se necesita mucha preparación, solo se necesita mucha decisión y mejor aún si se cuenta con atributos físicos de belleza, factor de éxito en la practica.
Consiste en una negociación o transacción con la simple formula: te dan sexo, te complacen y vos pagás con dinero o con otro tipo de bienes materiales, con influencias, con protección, etc.
La prostitucion se da en todas partes del mundo, en todos los estratos sociales, afecta a personas de todas la edades y razas, por eso hay diferentes tarifas para la adquisición del deseado producto.
El fenómeno de la prostitucion generalmente está relacionado al consumo de drogas y alcohol, a la vida obscura, agitada y festiva, pero sobre todo está relacionado a la pobreza y a las necesidades económicas, siendo la población pobre la que mas aporta materia prima para este negocio, gran negocio, porque allí no solo se benefician directamente quienes se prostituyen entregando su cuerpo y su alma, sino que a su lado parásitos inmorales explotan económicamente estas actividades utilizando cualquier medio para obtener su botín y olvidándose totalmente de que quienes les enriquecen son seres humanos, que se están destruyendo física, psicológica y moralmente, viviendo en un mundo vano y engañoso con satisfacciones efímeras y acumulando frustraciones y resentimientos que han de reflejarse por supuesto ante sus seres queridos y ante la sociedad.
La prostitucion nos afecta a todos, destruye moralmente a las personas involucradas, sin mencionar el peligro que ofrece al favorecer la proliferación de todo tipo de enfermedades, el ambiente malsano y poco confiable en que se desarrolla, el daño que produce su presencia en las relaciones sentimentales sanas, etc.
Lo mas grave es que su existencia y prevalencia se fundamentan en que siempre habrá quien compre el producto, los clientes potenciales somos muchos, somos todos aquellos santos y puritanos que nos escandalizamos para hablar del tema, o que con mucha autoridad moral nos atrevemos a juzgar radicalmente a quienes deben ejercer esta práctica o participan indirectamente de ella, o aquellos que lo disfrutan plena y abiertamente sin importarles las consecuencias personales, familiares y sociales de apoyar y participar de ello.
La verdad no recuerdo ni tengo conocimiento de que al tema de la prostitucion se le dé el interés que se merece, no se realizan campañas educativas fuertes para combatirla, los padres no son capaces de hablar abiertamente con sus hijos para brindarles orientación preventiva o de respaldo cuando la necesiten, los sistemas educativos através de sus instituciones no enseñan ni preparan a la juventud para enfrentar esta situación, los políticos no aportan ideas ni acciones válidas y sólidas para enfrentar el problema, el general de las personas afronta el problema dependiendo de lo involucrados que estén o no através de sus hijos y familiares y sus parejas, o personalmente.
En fin todos esperamos que el problema desaparezca por si solo, sin aportar y sin preocuparnos mientras no nos toque.
En cambio si predominan las críticas, la discriminación y el rechazo social, las acciones violentas y restrictivas, las acciones judiciales y legislativas.
Es indiscutible que mientras el producto tenga demanda, por supuesto se genera la oferta.
Claro que algunos políticos menores siempre se ocupan de estos temas utilizándolos como herramientas efectivas para favorecer sus campañas.
Este problema deberíamos considerarlo importante y actuar con mucha consciencia tratando de aportar un poco y de acuerdo a la forma en que lo concebimos y de nuestras capacidades, al fin y al cabo es otro gran problema social que tarde o temprano podría afectarnos también.

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